En una sesión que se prolongó hasta altas horas de la madrugada, la Cámara de Diputados de Argentina aprobó de manera unánime la media sanción al proyecto de ley que establece el 31 de octubre como el Día Nacional de las Iglesias Evangélicas y Protestantes. Esto marca un reconocimiento histórico a la comunidad evangélica del país y a su contribución a la vida espiritual y social de millones de argentinos.

El proyecto, que obtuvo la aprobación de todos los diputados presentes, es el resultado de un consenso entre diversas propuestas presentadas por las diputadas nacionales Dina Rezinovsky, Agustina Propato, Vanesa Massetani y Rossana Chahla, quienes representan distintas fuerzas políticas y expresiones de fe en el país.

Este paso legislativo representa un significativo reconocimiento a un sector de la población que desempeña un papel histórico, cualitativo y cuantitativo en la sociedad argentina. Según una encuesta realizada en el año 2019, aproximadamente el 15.3% de la población argentina se identifica como evangélica, destacando su importante labor en actividades sociales y espirituales.

La elección de la fecha del 31 de octubre es un gesto de especial relevancia, ya que conmemora el día en que Martín Lutero hizo públicas sus 95 tesis en 1517, marcando el inicio de la Reforma Protestante, un evento con un profundo impacto histórico y cultural.

Según la Alianza de Iglesias Evangélicas de Argentina (ACIERA) “esta medida fortalece la libertad religiosa en el país y valida el incansable trabajo social y espiritual de miles de iglesias evangélicas en Argentina”.

La media sanción obtenida en la Cámara de Diputados es un paso crucial para la futura promulgación de esta ley, que sería un importante reconocimiento oficial a la diversidad religiosa en Argentina y a la contribución de las iglesias evangélicas a la sociedad.

El proyecto continuará su proceso legislativo en el Senado de la Nación, donde se espera que sea discutido y, eventualmente, aprobado para su implementación como ley nacional.